Extensiones de Chrome que han robado datos personales
En más de un artículo hemos hablado de la seguridad de nuestros datos personales. Esta información, que suele contener datos privados de los usuarios, se puede llegar a robar utilizando extensiones maliciosos que instalamos de manera inocente en nuestros navegadores web.
Vamos a dedicar esta última noticia a hablar, precisamente, de extensiones maliciosas. Concretamente, de casi 30 extensiones para Chrome y Edge que tenían malas intenciones. Y es que estas aplicaciones han servido para robar datos personales de los usuarios que las tenían instaladas.
Las actividades maliciosas que se estaban ejecutando han sido descubiertas por investigadores de Avast, que han visto cómo Chrome y Edge, dos de los navegadores web más populares del mercado, estaban permitiendo el uso de software que daba resultados negativos a los usuarios.
Qué hacían estas extensiones
Tal y como se ha confirmado de manera oficial, lo que hacía el código de estas extensiones malintencionadas era redirigir a los usuarios a web con anuncios y páginas que tenían formularios de pishing. En estos sitios web también se recopilaban datos personales de los visitantes como fechas de nacimiento, direcciones de correo electrónico, dispositivos que estaban activos o, incluso, el historial de navegación.
Los investigadores de Avast han detectado casos en los que se descargaban aplicaciones maliciosas en los ordenadores de los usuarios, las cuales seguían ejecutando el robo de datos personales. El objetivo, claramente, era el de secuestrar el tráfico de los usuarios con el fin de obtener dinero.
Aunque desde la empresa se ha descubierto la existencia de las extensiones hace mes, se ha detectado que algunas de las mismas llevaban en activo desde diciembre de 2018, mes en el que también se informaba de los primeros casos en los que los usuarios estaban siendo redirigidos a otras webs.
Algunas extensiones todavía no se han borrado
Tras comprobar el número de instalaciones de estas aplicaciones, se ha concretado que se habían instalado y ejecutado en miles de ocasiones, aunque la mayoría de veces se hacían pasar por otros servicios oficiales. Se estima que existen un total de, al menos, tres millones de instalaciones.
Por cierto, hay que añadir que las extensiones se han reportado a Microsoft y Google, aunque ninguna de las dos empresa las han borrado en su totalidad de las tiendas que les pertenecen. En cualquier caso, se espera que sean borradas próximamente con el fin de que los usuarios no puedan seguir usándolas.
Cuidado con las aplicaciones que instalamos
Lamentablemente, no es la primera vez que ocurre algo así: nos ponemos a instalar aplicaciones o extensiones que en ocasiones tienen orígenes desconocidos, y que son peligrosas para nuestros datos personales. Por lo tanto, tenemos que recordar que es imprescindible tener cuidado con las cosas que instalamos, tanto en nuestros ordenadores como en nuestros dispositivos móviles.
La seguridad informática se ha convertido en una de las principales preocupaciones mundiales. Principalmente porque están en juego nuestros datos personales y nuestro dinero. Por lo tanto, es necesario que la reforcemos para no tener mayores dolores de cabeza.
