Los inicios del Watch de Apple – Historia
La historia del Apple Watch se remonta al año 2013. Apple hace una oferta de trabajo a Kevin Lynch para unirse a sus filas buscando un dispositivo innovador, elegante y que diese mucho juego a los usuarios de iPhone. Lynch era por entonces vicepresidente de tecnología de Adobe, y ya muchos lo conocían por arremeter contra Apple y Steve Jobs, cuando este último decidió no dar soporte nativo a la aplicación multimedia Flash en su sistema operativo iOS para dispositivos portátiles. Y es que Jobs quería una versión de Flash ligera y potente, algo que los desarrolladores de Adobe no dieron conseguido, haciendo que poco a poco esté dejando de utilizarse hasta en dispositivos Android dando paso a la implementación de HTML 5.
¿Conoces las autoradios de Apple?
Una vez que los medios se hicieron eco de la noticia del fichaje de Kevin Lynch, muchos crucificaron a Apple pensando que había tomado una decisión completamente errónea; pero… ¿el tiempo le dió la razón a los de Cupertino? La respuesta es si!. Tan pronto llego a Apple y bajo los mandos del diseñadir Jony Ive, quedaba un largo trecho para hacer un dispositivo de muñeca, un Apple Watch. Lynch no se creía lo que Apple estaba intentando hacer de nuevo, revolucionar un mercado que se encontraba estancado, de igual forma que hizo con los iPhone, iPod y iPad.
Era todo un reto que había que afrontar para crear un dispositivo único. Los iPhone fueron algo sorprendente en su momento. ¿Quién podía imaginarse por entonces un móvil tan avanzado para su época? Jobs lo hizo, y ahora la tarea volvería a resultar difícil de imaginar. Desde entonces hemos visto miles de fabricantes diseñando y ensamblando smartphones, todos a la cola del producto estrella de Apple, aunque hoy por hoy hay alternativas muy buenas, sino mejores. Luego llegaron las primeras tablets, una guerra de mercado entre los grandes fabricantes como Samsung para coger un trozo del pastel que se estaba zampando Apple; hoy un extenso mapamundi de tablets inunda las estanterías de los centros comerciales y tiendas especializadas.
Con toda la carne en el asador, empezaba lo bueno… crear un producto que se moviera de forma natural a nuestros pasos, un reloj… ese aparato que ha formado parte de nuestra cultura desde hace cientos de años, pero ahora de una forma totalmente nueva, un complemento que nos de un poco más de simplificación en nuestro día a día. Para ello había que crear un sistema operativo y una interfaz completamente perfecta. Solo de esta forma el Watch de Apple podría pasar de estar en mano de todo el mundo o a formar parte del museo de las joyas fracasadas, donde podemos encontrar el Power Mac G4 Cube, el Puck Mouse o la consola Pippin. Fue esta y no otra la tarea de Alan Dye, crear una interfaz de usuario única, que se encargara de poder saber decirle al reloj lo que queremos hacer y que el Watch realice nuestro propósito.
El diseño, aunque en parte la idea fue de Jon Ive sobre el año 2010 después de la muerte de Steve Jobs, buscaba integrar nuestro smartphone en la muñeca, de forma que leer un mensaje, o comprobar nuestra agenda no implicase tener que sacar el móvil del bolsillo. Esto fue parte de la idea que el equipo de desarrollo tenía. Estaban hartos de tener que estar sometidos a un smartphone, siempre sacandolo del bolsillo a cada “zumbido”, enganchados plenamente a algo tan tosco como un trozo de plástico, cristal y metal. En sus palabras querían “filtrar toda la mierda” y enviar a tu muñecalo más importante. Con esa idea y con iOS 7 comienza el compromiso con el Apple Watch.
Curiosa búsqueda y curiosa contradicción; las primeras versiones del Apple Watch fueron un iPhone pegado a la muñeca con un velcro. Así lo confiesa Lynch, hicieron todo un prototipo de aplicación que imitaba lo que finalmente sería el Watch. Fabricaron incluso una manecilla, primero digitalmente y en la pantalla y posteriormente conectada con un cable y de forma física, para ver como funcionaba realmente el “reloj inteligente”. De esta forma empezaron a probar las aplicaciones que llevaría el Watch. En primer lugar buscaron una solución sencilla para responder mensajes, que no pasase por tener que escribir letra por letra un texto. Así nace el llamado Quickboard, una parte del software que aprende recopilando todos tus mensajes, para darte respuestas predefinidas.
Buscaban realizar cualquier interacción con el Apple Watch en tan solo 5 segundos, 10 como mucho, algo que necesitaría de un sistema operativo realmente rápido y un buen Hardware. Lo primero lo consiguieron reescribiendo el código dos veces, lo segundo… es Apple.
¿Dónde comprar el Watch?
Si queréis comprar el Apple Watch, os recomendamos que visitéis la página web de Apple, realizando la adquisición online para que después os confirmen la tienda en la que podéis recoger el paquete. Posiblemente lo encontréis más económico en Amazon., por lo que no está de más echarle un vistazo.
Apple Watch, el hype materializado
Apple Watch. El propio nombre ya provoca que nuestra cabeza comience a pensar cosas sorprendentes y una gran cantidad de posibilidades en movimiento, a cada cual más interesante. Sin embargo, es necesario que nos remontemos a los inicios para descubrir todo lo que ya ofrece el dispositivo y todo lo que podría llegar a ofrecer.
Tenemos que viajar hasta diciembre de 2012 (si, hace casi tres años) para observar los primeros rumores que empezaron a surgir en torno a la poderosa Apple. Por aquél entonces se rumoreaba que la propia empresa de la manzana e Intel estaban trabajando en un reloj con iOS. Se decía que tendría una pantalla OLED de 1,5 pulgadas, que sería similar a los smartwatches que ya estaban despuntando en el mercado, y que serviría como accesorio del teléfono, para contestar llamadas y mostrar información. Se acercaban mucho a las funciones finales.
Por aquél entonces también se daban fechas: primer semestre de 2013. Es evidente que no se llegaron a cumplir, sobre todo porque el desarrollo estaba en una etapa más o menos temprana.
No hay duda de que, aunque la cantidad de rumores bajó de manera considerable, el producto no se quedó en el olvido. Apple estaba preparando algo arrollador que marcaría tendencia. Tuvimos que esperar dos años más hasta que se materializara, surgiendo por el camino un montón de habladurías que se iban acercando mucho a lo que finalmente tendríamos entre las manos.
El 9 de septiembre de 2014, aprovechando la Keynote que tuvo lugar ese día, Tim Cook presentaba oficialmente el smartwatch: Apple Watch iba a arrasar en el mercado gracias a todas las características que ya tienen los productos de la empresa.
Desde el principio se dejaba claro que no iba a ser uno como los que ya están disponibles en tiendas, sino que iba a contar con funciones muy especiales. Por ejemplo, el sistema operativo que se usa es Watch OS, una versión reducida de iOS. Tiene una corona digital que cumple a la perfección la función de “Home”, permitiendo incluso abrir aplicaciones, aumentar y reducir contenido. Incluso hay algunos trucos que hemos podido descubrir recientemente. La pantalla retina es flexible, con una protección diferente para cada clase de reloj, detectando la presión sobre la pantalla y comprobando las dierentes respecto los toques.
Mencionar también la inclusión de un sensor de pulso cardíaco para monitorizar nuestra actividad física, Apple Pay, Digital Touch (app con la que podemos hacer dibujos) y Siri, el popular gestor por voz.
Tres ediciones para manejar y disfrutar
Apple sabe muy bien que el dispositivo está siendo uno de los más cotizados y deseados del mercado, por lo que ha querido llegar a diferentes sectores de la población. Actualmente se encuentra disponible en tres ediciones:
- Apple Watch básico: Incluye caja de acero inoxidable en plateado o negro espacial, pantalla protegido con cristal de zafiro, y correos de piel, eslabones, de estilo milanés y diferentes tipos de broches.
- Apple Watch Sport: Una edición con caja de aluminio anodizado en plateado o gris espacial. La pantalla está protegida a su vez con ion-X reforzado, con una correa de fluoroelastómero, disponible en cinco colores.
- Apple Watch Edition: La edición más interesante, con caja de oro amarillo o rosa de 18 uilates, pantalla protegida con cristal de zafiro y correos a elegir. Eso si, su coste no baja de los 10.000 dólares. Es el producto más caro de Apple.
Funcionalidades por hardware y software
El Apple Watch no se limita a poner en marcha funcionalidades por software, sino que también lo hace por hardware. Mientras que la pantalla táctil nos permite seleccionar las diferentes opciones disponibles, hay que prestar atención a la corona. Cada gesto supone una acción. Los de giro, por ejemplo, permiten ir accediendo a aplicaciones y funciones. También nos ayuda a hacer zoom sobre la sección en la que estemos, facilitando cosas como la navegación o la toma de fotos (si hacemos uso de los trucos disponibles, claro). Es muy posible que la cantidad de opciones vayan aumentando.
En cuanto al software, no nos llevaremos muchas sorpresas. En la memoria flash del dispositivo se almacenarán todas las aplicaciones disponibles, incluyendo el sistema operativo Watch OS, que será el que lleve la voz cantante. El pack está completamente optimizado para obtener el mejor rendimiento y para que no nos comamos la batería en apenas unas horas. Aunque, eso si, serán necesarios algunos ajustes para no tener problemás en un futuro.
Con Watch OS 2 Apple ha querido dar mayor independencia a muchas de las funciones nativas, incluyendo su soporte. De esta manera, la interfaz de las aplicaciones se trasladan al dispositivo directamente desde el propio teléfono, funcionando de manera nativa y sin tener que poseer un acceso directo al dispositivo iOS sincronizado. El acelerómetro también se puede usar ahora de manera autónoma para el registro de variaciones en la monitorización de las actividades deportivas. Incluso, el motor táptico toma más protagonismo con funcionen que se podrán añadir a la propia corona digital.
Hay disponibles tanto widgets como notificaciones, dos aspectos que han sido optimizados para entrar en la pequeña pantalla del dispositivo. La respuesta táctil también es otro punto fuerte. Con solo unos toques tendremos la oportunidad de enviar mensajes, responder a nuestros contactos o poner en marcha la alarma.
Características del Apple Watch
Apple no ha comentado mucho sobre el hardware interno que lleva el smartwatch, aunque sí hemos podido conocer algunos detalles muy interesantes. Por ejemplo, incluye un chip S1 gracias al que se pueden realizar una gran cantidad de operaciones internas. Ahí también están todos los componentes electrónicos del dispositivo. Un trabajo titánico, pero que tiene su recompensa.
Otra de las preguntas que nos hacíamos era la capacidad de la batería. En este aspecto nos llevamos una decepción al conocer que dura, según Apple, “18 horas de uso de aplicaciones combinado con reposo“. La misma se puede recargar gracias al sistema de carga de inducción magnética combinada con la tecnología MagSafe.
Aunque haya varias ediciones, lo cierto es que todas ellas coinciden en algunos datos que sería conveniente conocer con el fin de poder hacernos una idea de lo que tendremos en la muñeca. A continuación tenéis una lista con las características más interesantes (y en común):
- Sistema operativo: iOS.
- Tamaño de la pantalla: 1,32 pulgadas.
- Dimensiones: 1,52 x 1,31 x 0,41 pulgadas.
- Almacenamiento: interno.
- Peso: depende de la versión.
- Colores disponibles: depende de la versión.
Especial atención a los datos que marcamos como “depende de la versión”. Algunas ediciones (sobre todo las más caras) tienen características que varían de las ediciones más básicas. Hay que tener en cuenta esta información. No olvidéis que dependiendo de lo que queráis será más recomendable uno u otro producto. Es evidente que si, por ejemplo, va a recibir golpes, compréis uno más duradero.
Errores y fallos
El Apple Watch no se queda atrás en cuestión de fallos. Ya sabéis que los últimos productos que se están lanzando también van acompañados de errores, los cuales suelen ser resueltos en la mayoría de casos. Podríamos mencionar muchos, pero la verdad es que preferimos quedarnos en dos que han salido por encima de los demás:
El motor táptico del reloj ha experimentado errores desde su propia producción. Algo que ya ha provocado retrasos incluso en la puesta a la venta. Este componente se encarga de comprobar si el usuario tiene puesto o no el dispositivo en la muñeca. El resultado ha sido una disminución en la producción del aparato, obligando a Apple a encargar el componente a otra empresa, Nidec Corp.
Por otra parte, mencionar los fallos de lectura que devuelve el smartwatch cuando se lo pone gente que tiene tatuajes. Básicamente porque el dispositivo se desconecta, solicitando el PIN correspondiente. La responsable sería la tinta, la cual interferiría con el sensor de frecuencia cardíaca.
Es evidente que el software también adolece de errores: lentitud, fallos que ni siquiera muestran mensajes y todo tipo de cosas raras que están provocando dolores de cabeza a los propios usuarios. Desde Apple siguen trabajando duro en la actualización del sistema operativo que viene incluido. Las actualizaciones no se harán de esperar mucho.
Antes de terminar este apartado mencionar que algunos fallos de seguridad están siendo aprovechados con el fin de ejecutar diferentes trucos en los aparatos. Lo malo es que no sabemos si serán solucionados.
Mercados
Apple, como siempre, ha trabajado para hacer llegar el reloj a la mayor cantidad de países. Sin embargo se han encontrado con difernetes tipos de problemas que les han impedido ponerlos a la venta en muchos lugares. El dispositivo salía a la venta durante el pasado mes de abril en nueve mercados: Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Canadá, China, Francia, Alemania, Hong Kong y Japón. La adquisición debe realizar desde la propia página web de la compañía.
Queda una incógnita: ¿a dónde llegará? Apple no ha realizado demasiados anuncios al respecto, por lo que desconocemos casi por completo los países en los que tienen pensado ponerlos a la venta. <<Disponible ya el Apple Watch Series 2, analizado aquí.>>
En cuanto a cifras de ventas, volvemos a quedarnos sorprendidos: durante la primera hora se vendieron el 62% de unidades del dispositivo, llegando al 86% en ocho horas. Según algunos analistas, a fecha de hoy se habrían vendido 1,4 millones de unidades, aunque las cifras exactas y oficiales se desconocen. Añadir que muchos de estos datos han sido provocados por el hype que ha ganado el dispostivo. Desde su anuncio, no han sido pocas las personas que han estado ahorrando al máximo para tenerlo el día de la salida. Algo que ya está provocando problemas.
Un estudio llevado a cabo por MarketWatch confirma que la compañía de la manzana mordida a pasado de vender 200.000 Watch diarios a facturar únicamente 10.000. Eso, claro, solo en algunos días y dentro de Estados Unidos. Una bajada de las ventas del 90% que ya les está pasando factura. Malas noticias, sobre todo porque los planes eran que el dispositivo obtuviera un nivel de compras mayor durante los primeros meses, tal y como ya sucede con sus iPhone y iPad.
Será el próximo 21 de julio cuando se publiquen los resultados trimestrales de la compañía. Y será también entonces cuando podamos ver el éxito que ha tenido el Apple Watch (y la propia empresa).
Aplicaciones del Apple Watch
La mayoría de aplicaciones del Apple Watch tienen un único objetivo: mostrar información. Hay otras que funcionan como utilidades, que sirven para mantenernos en contacto con nuestros amigos, o simplemente que nos ayudarán a entretenernos. El ecosistema se hace cada día más grande; ahora mismo hay cientos de desarrolladores intentando hacer que haya cientos y cientos de apps, a cada cual más interesante.
Según las últimas estadísticas, existen más de 3.500 aplicaciones disponibles. Pero, claro, de ahí tenemos que extraer las que usaremos y las que no. Ya sabéis que habrá muchas que son inservibles (tal y como ya sucede en otras plataformas).
Los programas más populares ya se han desarrollado: WhatsApp, Telegram, Skype, clientes de correo electrónico, Twitter… Y la lista se sigue ampliando a cada hora que pasa.
Y por último, puesta a la venta en España
La espera ha sido larga, pero por fin tenemos en España el tan ansiado Apple Watch. El reloj inteligente ha llegado de una manera más silenciosa de lo que esperábamos. Fue el pasado 26 de junio cuando las tiendas de Apple y distribuidores autorizados ponía a la venta el dispositivo (con un precio dependiendo de la edición).
El precio inicial que se maneja en nuestro país es de 419 euros, pero ya sabéis que el mismo podría subir de manera significativa según las características que queráis. Ya sabéis que actualmente se encuentran disponibles más de 3.000 aplicaciones de marcas como Evernote, Nike + Running o Tripadvisor. De todas formas, lo más seguro es que la cantidad de posibilidades vaya aumentando durante las próximas semanas. Podríamos decir que el aparato lleva a la venta muy poco tiempo.
